La segunda película como directora de la actriz francesa Noémie Merlant es una comedia gore que levantará ampollas
El género del rape and revenge —a saber: una mujer es violada y, posteriormente, se venga de la manera más imaginativa y sangrienta posible—, en sus orígenes profundamente misógino y destinado a la explotación y cosificación sexual femenina, comienza, en la época moderna, a ser apropiado por las directoras para darles otro giro, más feminista y consciente.
Tomemos como ejemplo el debut de Coralie Fargeat, la espléndida directora de La sustancia. En su estupenda Revenge, una chica se vengaba de sus violadores de manera furiosa e iracunda, con una fotografía que estallaba en mil colores, saturadísima, y que escondía un mensaje tremendamente necesario. Una película que, por cierto, tenéis disponible en Prime Video.
Y ahora, justo hoy 14 de marzo, se estrena en cines Las chicas del balcón, la nueva película como directora de la francesa Noémie Merlant (Retrato de una mujer en llamas), una salvaje comedia gore y muy negra en la que un grupo de mujeres se enfrentarán a una situación límite, llena de sangre, salvajismo y mucho gore.
Con guion de una de las mejores directoras francesas en activo, Céline Sciamma, Las chicas del balcón está libremente inspirada en las propias vivencias de Merlant como actriz y modelo. En las notas de producción de la cinta, asegura que la cinta “Surgió por una situación real que me sucedió a mí misma y de la que tuve que huir porque no me sentía bien. Me refugié con mis amigas, viví en un gineceo durante varios meses, y fue otra dinámica vital. Enfrente, teníamos a un vecino —nada que ver con el de la película—, y le veíamos observarnos. Le producía curiosidad nuestra libertad, la desnudez con la que nos paseábamos, que no era seductora, sino de pura confianza entre nosotras. Este es el punto de partida de la película, una gran fuerza liberadora que nos lleva al humor, al gore, al exceso, a lo absurdo, a lo fantástico”.

Filmin
Las chicas del balcón se sitúa en un verano sofocante, en un barrio de Marsella. En un edificio viven Nicole (Sanda Codrenau), una escritora voyeur (valga la redundancia) que comparte piso con Ruby (Souheila Yacoub), una extrovertida camgirl que es la viva imagen del sexo libre y sin prejuicios. A ellas se le suma una actriz que imita a Marilyn Monroe y que está atrapada en una relación tóxica. Un día, sin embargo, Ruby regresa al piso ensangrentada y sin saber qué había pasado la noche anterior.
Una propuesta radical que, como todas las historias llevadas al extremo, ha convencido a unos y no tanto a otros. Si, por ejemplo, en The Hollywood Reporter la tachan de «floja», Luis Martínez en El Mundo la define como «un ejercicio de cine alborotado, imperfecto y caótico, pero irrefutablemente libre y muy pero que muy disfrutable«. En definitiva, una cinta que no dejará indiferente y que, como bien dicen en Screendaily, «probablemente divida al público, pero aquellos que encajen con su estilo intransigente disfrutarán del estimulante viaje».
«Merlant es muy punk en su propuesta, muy libre en su alegato feminista y muy salvaje en sus acciones. Esto no es una crítica a la sociedad desde una posición sosegada como es Barbie, sino una reivindicación más cerca de Una joven prometedora si a Emerald Fennell, directora de ese genial filme, le diese completamente igual lo que el resto del mundo opinara sobre ella», decimos en la crítica en SensaCine. «La directora no se anda con reservas a la hora de señalar a los violadores como lo que son: unos criminales. La historia se narra a través de los balcones. Las chicas pasan el tiempo en ese pequeño espacio al aire libre, mostrándose tal y como son, a veces desnudas, a veces riéndose demasiado alto, y siempre siendo vigiladas por vecinos del edificio de enfrente. Como en la vida real, son juzgadas por miradas ajenas -y masculinas- que terminan marcando su destino, por mucho que ellas intenten mirar hacia otro lado.
Si quieres salir de dudas, saber si te convence y apostar por un estreno diferente, gore y salvaje, no te pierdas solo en cines Las chicas del balcón.