Dirigida por Jon M. Chu y protagonizada por Cynthia Erivo y Ariana Grande, ‘Wicked’ debuta en las salas de cine este viernes 22 de noviembre.
«Cuando la vi por primera vez ya supe que Wicked era una historia extraordinaria. Es la verdadera historia de la Bruja Mala del Oste y de El Mago de Oz», sentencia Jon M. Chu sobre la pasión que despierta en el público la historia de fantasía ambientada en el también apasionante mundo de Oz tiempo antes de que la protagonista de El mago de Oz, Dorothy Gale, llegase al mágico lugar.
Basada en la novela de 1995 de Gregory Maguire y a su vez en el exitoso musical que lleva más de dos décadas arrasando en Broadway, la película Wicked llega a las salas de cine de todo el mundo este viernes 22 de noviembre como uno de los estrenos más esperados del año. Y no es para menos: con ella se pone fin a una espera que se ha alargado durante más de 10 años desde los primeros planes de Universal de trasladar a la pantalla el éxito del musical. La expectación es máxima y Chu, el cineasta estadounidense de origen chino de 45 años más conocido por su trabajo en En un barrio de Nueva York y la querida comedia Crazy Rich Asians, lo tiene claro. También es una historia que a él, a nivel muy personal, le mueve muchas cosas por dentro.
«El Mago de Oz tuvo un efecto muy profundo en mi propia narrativa cuando estaba creciendo», recuerda en su entrevista con SensaCine con motivo del estreno de Wicked. «Mis padres vinieron de China y entendieron el poder de los sueños, así que, para mí, culmina en muchas cosas».
Dirigida por Chu con guion escrito por Winnie Holzman y Dana Fox y su vez adaptación del la obra de teatro musical de Stephen Schwartz y la propia Holzman, Wicked está protagonizada por Cynthia Erivo y Ariana Grande, y narra, desde la mágica y fantasiosa tierra de Oz, la historia de dos brujas que no podrían ser más diferentes. Mientras Glinda (Grande) es una joven privilegiada, bonita y atractiva, Elphaba (Erivo) tiene que demostrar su valía una y otra vez debido a su verde color de piel verde y a no haber descubierto, de momento, sus verdaderas habilidades. A pesar de lo diferentes que son, las dos brujas se vuelven las mejores amigas durante su paso por la Universidad de Glizz, antes de que una serie de eventos inesperados las ponga frente a una decisión trascendental.
‘Wicked’, una verdadera celebración de lo que es ser diferente y lo que esa diferencia puede hacer
La historia de fantasía de Wicked transcurre mucho antes del famoso cuento de L. Frank Baum y determinará los destinos de ambas brujas como la Bruja Buena del Norte y la Bruja Mala del Oeste, pero, para Chu, en estos tiempos sigue siendo una historia «muy relevante».
«El Mago de Oz es uno de los más famosos cuentos de hadas americanos. Fue escrito en un momento en que Estados Unidos estaba en transición, cambiando de la Gran Depresión a la guerra, así que era como la muerte del sueño americano. Una especie de ‘¿Qué va a pasar ahora?’, con muchas incertidumbres», reflexiona el cineasta. «Cuando yo vi Wicked [el musical], el 11 de septiembre acababa de suceder y había mucha incertidumbre. Y creo que ahora es muy muy similar ¿no? Durante el COVID y entre todas las cuarentenas, recibí la llamada para esto y recuerdo pensar: ‘¿Es necesario hacer esto?’. Y las palabras ‘Algo ha cambiado dentro de mí, algo no es lo mismo’ resonaron en mí tan profundamente que me dije: ‘Creo que todo el mundo se siente así. No sabemos qué viene ahora’. De repente estábamos fuera de control y no había ningún mago detrás de esa cortina y eso da miedo, pero creo que esto lo cura de alguna manera. O nos dice que el mundo no necesariamente tiene un final feliz o que no es necesariamente feliz todo el tiempo, pero que esa ira y ese miedo puede ser la única salida y la única forma de avanzar para nosotros».
Además, las protagonistas de la película, Cynthia Erivo y Ariana Grande, también creen que la historia que vemos en Wicked, aún rodeada de fantasía, retrata, algo tan «relevante como atemporal», que es cómo abrazar la diversidad y lo que nos hace diferentes nos hace mejores. «Me apasiona la forma en que Wicked retrata el mundo y la capacidad de mantener el espacio para los matices y la humanidad y las complejidades que tan a menudo no consideramos y llegamos a ver», asegura Grande. «Ver cómo la gente avanza a través de eso y se acerca y reconoce sus similitudes, incluso cuando piensan que son más diferentes. Es una historia muy conmovedora en ese sentido y creo que puede inspirarnos a todos para ser mejores y más sinceros. Tanto con nuestros amigos y como con nosotros mismos».
‘Wicked’ es una verdadera celebración de lo que es ser diferente y lo que esa diferencia puede hacer. Cómo puedes acercarte a los demás en la aceptación de eso y la proclamación de que puedes desafiar la gravedad. De que puedes estar por encima de todo. Creo que en realidad todos queremos que nos digan y queremos saber que podemos lograr cualquier cosa que nos propongamos
» Creo que siempre será relevante», añade Erivo. «Siempre será relevante contar este tipo de historias para enseñar a la gente que podemos cambiar para enseñar a la gente que está bien hacer espacio para personas que no son como nosotros».
Jonathan Bailey, que interpreta a Fiyero Tigelaar y el veterano Jeff Goldblum, quien encarna al Mago de Oz, coinciden de lleno: «Creo que, en particular, este mes será increíble para la gente tener una escapada para ir al cine y para que todos tengan un momento de alegría y celebración, especialmente por una película que celebra nuestras diferencias», señala Bailey. A lo que Goldblum añade: «[Wicked] Demuestra cómo una persona puede encontrar su pasión y poder y marcar la diferencia en toda la comunidad y cómo tu burbuja puede estallar en un momento y puedes empezar a prestar atención a cosas fuera de tu área de interés personal».
La oportunidad de sentir la magia de ‘Wicked’, más cerca y más real
Con un presupuesto reportado de 145 millones de dólares y una secuela ya confirmada, Wicked Parte 2, que se estrenará el 25 de diciembre de 2025, Jon M. Chu ha puesto toda su creatividad al servicio de algo con vocación de estar a la altura de uno de los musicales más exitosos de la historia. Nunca más pequeño. «El Mago de Oz en sí tiene una tradición cinematográfica, es lo que expandió tu cerebro en primer lugar cuando pasó al color. Así que para mí fue como si tuviéramos la responsabilidad de usar la pantalla cinematográfica», nos explica Chu. «El cine también puede acercarte más que un escenario, así que podemos estar a dos pulgadas de sus caras y eso nos brinda momentos emocionantes muy íntimos y reales. […] Quería asegurarme de que usábamos esas herramientas que teníamos a nuestro alcance y que en otro medio no se podría».
Quiero recordarle a la gente cómo es ir al cine. Quiero que el espectáculo de los eventos cinematográficos épicos sea como yo me sentía cuando era niño viendo películas. Quiero que la gente se sienta así
Las herramientas de Chu para conseguirlo no solo tienen que ver con las posibilidades que ofrece la magia del cine en pleno siglo XXI, sino en en sus dos brillantes actrices principales, para las que el cineasta solo tiene los mejores elogios.
«Jon Chu es el maestro de pasar de un medio a otro», elogia Bailey al cineasta. «Fue realmente emocionante tener una cámara cerca de la acción que tanto me ha gustado en el musical original y el matiz expansivo que puedes capturar en esos momentos. En el libro del musical las escenas son muy simples y están expertamente construidas para que puedas moverte rápida y claramente a través de grandes momentos emocionales. Y ahora en una película tienes estos momentos más quietos en los que puedes mostrar mucho».
«Vi en ‘En un barrio de Nueva York’ en el escenario y luego cómo Jon M. Chu hizo una película sobre ella y pensé que era fantástica», recuerda Goldblum. «Realmente descifró el código de cómo hacer un gran musical, con todo lo que amas de un gran musical llegando a su máximo esplendor y al mismo tiempo mezclándolo con naturalidad cinematográfica y una actuación sutil y matizada. Todo junto. Pensé que lo hizo tan bien como jamás he visto». «Hay dos magos aquí: está Jeff Goldblum y también está Jon M. Chu», sentencia Bailey. «Ambos son mágicos en en todos los sentidos».
Cynthia Erivo y Ariana Grande, «no puedes hacer esta película sin estas dos mujeres»
«No puedes hacer esta película sin esas dos mujeres», resume Chu con la cara iluminada al hablar de sus actrices. «Cynthia ya es icónica, pero cuando se mete en este papel, cuando canta estas palabras, que hemos escuchado muchas veces, está diciendo muchas más con sus ojos. Ella lo entendió».
«En el espectáculo [de Broadway], los espectadores están viendo esto como una parte de Oz cuando aparece esta chica verde y es el hazmerreír. Sin embargo, en esta película te das cuenta de que la audiencia de un cine es diferente, de que en realidad estamos entrando en un mundo extraño de canto y baile y de que estamos en el lado de Alphaba», explica el director. «Luego ella va despertando a la gente en el camino: Fiyero [al que encarna el actor de Los Bridgerton Jonathan Bailey] hace su primera pregunta real en cierto punto y también lo hace Glinda, y entonces es casi un despertar de esta forma simple de ver la vida. Para mí, ese es el poder de lo que podemos hacer en esta película».
Respecto a Ariana Grande, Glinda, el director reconoce que tuvo dudas sobre su fichaje: «Tenía muchas dudas antes de contratarla, cuando venía a las pruebas. Pero cada vez que venía era la persona más interesante de ver y se notaba». «Dios mío, la gente no sabe lo buena que es Ariana. Saben que es genial, pero no en este formato. Es divertida, es emotiva, entiende este personaje y comenzó a vivir como Glinda. No estoy seguro de si alguna vez dejó de serlo».
Sentimos que conocemos a Ariana Grande, pero, de esta nueva manera, creo que es un descubrimiento en muchos sentidos, y la gente se sorprenderá
«Es un privilegio y es una experiencia de aprendizaje extraordinaria» asegura Ariana Grande sobre las posibilidades que ofrece contar una historia como la de Wicked en pantalla grande, admitiendo que permite posibilidades que no ofrecen el escenario de un teatro. «Podemos ver los pensamientos, porque tenemos la oportunidad de un primer plano. Y los chistes que se hacen en la parte de atrás de la casa en el escenario, los podemos hacer aquí mismo», asegura acercándose la mano a la cara. Su compañera está de acuerdo: «Bromeamos sobre la dificultad de volar y sí, es difícil, pero en el escenario, Alphaba tiene que imaginar que tiene que hacer que todos en la sala imaginen que está volando, lo cual es muy difícil. Pero yo tengo el placer de poder volar, tengo un arnés y soy capaz de hacerlo. No tengo que imaginar que puedo, solo cantar en el aire».
El futuro de ‘Wicked’ ya está escrito
Tras Wicked, todavía tendremos que esperar un año para conocer el final de la historia, pero el cineasta nos adelanta que todavía queda mucho que decir: «Si la primera historia es sobre liberar la idea de control -controla tus emociones, controla tu amor, el amor es perfecto- y rendirse a tu propio poder, rendirse al desorden de lo desconocido que es nuestro único camino hacia adelante, la segunda película son las consecuencias de todo eso». Además, promete Chu, con la segunda película «te adentras más en el mago, este gran narrador. ¿Hasta dónde puede llegar un narrador cuando sabe que la violencia y un villano ayudan a mejorar una historia y a conseguir capturar a la comunidad? ¿Qué pasa cuando vas demasiado lejos y estás dispuesto a ir más allá para entretener? Creo que esas son preguntas interesantes».