Uno es Jackie Chun, sí, pero… ¿Y el otro?
Durante muchos años, cuando le preguntaban a Akira Toriyama quién era el Goku perfecto para interpretarlo en una película, nunca dijo Justin Chatwin (que acabaría haciéndolo en la infame Dragonball Evolution), sino, por supuesto, Jackie Chan. De hecho, el mangaka llegó a decir que todo Dragon Ball no habría existido sin la afición que tenía por el actor y sus películas de lucha. Sin embargo, aquella ansiada película que habría demostrado que la franquicia puede hacerse en acción real nunca se filmó, Chan es ahora demasiado mayor y, claro, queda para la historia de los «Y si».
Dragon Chan
Sin embargo, al principio del manga Toriyama no quiso dejar de hacer un par de homenajes a Chan, que por aquel entonces aún no era una estrella de Hollywood pero se había convertido en toda una sensación entre los aficionados al cine de peleas asiático. Uno de ellos fue, por supuesto, Jackie Chun, que en realidad era el Duende Tortuga con otro aspecto queriendo competir en el Torneo de Artes Marciales. Ganó, de hecho, destruyendo la Luna y evitando así que su pupilo se convierta en un gorila gigante.
Sin embargo, no es tan sabido que el apodo de Jackie Chan se utilizó para dar nombre al dragón que aparece al juntar las siete bolas. Como lo oyes. Resulta que Chan, cuyo verdadero nombre es Fang Shilong, decidió llamarse Sing Lung al principio de su carrera discográfica. Toriyama cogió el nombre, lo cambió un poco y lo convirtió en Sheng Long. Pura magia.
Sí, ya sé que a estas alturas te estás preguntando que cómo que «su carrera discográfica». Lo cierto es que Jackie Chan tiene doce discos (el último de 2018) y sigue sacando canciones de manera habitual, convertido no solo en un actor y un maestro de las artes marciales, sino también en un hombre que sabe entonar. Vivir para ver.