Tras haber triunfado en Hollywood y con Chinatown recién llegada a los cines, el intérprete recibió una noticia que parecía sacada del guion de una de sus películas
Yo no dejo de preguntar qué están haciendo los guionistas de mi vida en este 2024, pero si siguen en sus trece, al final la que va a terminar escribiendo sobre lo que estoy viviendo soy yo, ¡capitalicemos el dolor y los vaivenes de todo esto! Hace un par de semanas o tres estaba cenando con mi hermano y le dije que ya no cabían más giros este año y me advirtió que aún quedaban un par de meses, que me anduviera con cuidado. ¡Y en efecto! Pero de todos modos, nada de esto que está aconteciendo en mi día a día anda cerca de aquello que tuvo que afrontar Jack Nicholson.
Lo sé, ahora estarás diciendo que qué manera de hilar temáticas… No, en serio, lo de este hombre parece sacado de una telenovela turca, ¡qué digo turca!, ¡india! ¿Sabes cuáles son esas tramas en las que en realidad la madre es la abuela y la hermana la madre? Vale, pues justo eso fue lo que le pasó al actor.
Sí, sí, tal y como estás leyendo y recoge InStyle en su columna Hollyweird, donde narra las historias olvidadas más extrañas de las estrellas del «show business», a los 37 años y de casualidad Jack Nicholson se enteró de que la que siempre había creído su hermana, June, era en realidad su madre.
Al parecer, la mujer se quedó embarazada cuando aún era menor de edad y estando soltera. El padre de Nicholson además estaba casado, por lo que la situación, en los años 30, no es que fuera muy favorable para June, que además quería dedicarse precisamente al mundo del espectáculo y sabía que todo su contexto no favorecería para nada su vida.
Fue entonces cuando la abuela de Jack Nicholson, Ethel May, tomó cartas en el asunto y pasó a ocupar la posición de madre, deshaciéndose del padre del actor bajo amenazas. Algo que le pega muchísimo a alguien que se llama Ethel May, ciertamente. Para ello se valió de una ley establecida para restringir el tráfico y la prostitución de menores y que también se utilizaba incluso cuando las relaciones eran consensuadas.
De este modo la familia de Nicholson logró ocultar la historia real. De hecho, Juno se fue a perseguir su sueño, primero a Miami y luego a Los Ángeles, ciudad donde más tarde se unió a ella su hermano-hijo, cuando decidió también que lo suyo era el mundo del espectáculo.
No obstante, no fue hasta los años 70, cuando el actor estaba rozando las mieles del éxito una vez más, en este caso con Chinatown, cuando se enteró de su verdadera historia familiar. ¿Lo peor? Que fue casi de casualidad a través de un periodista que estaba preparando una pieza sobre él para Time. Fue el encargo de llamarlo por teléfono y trasladarle una información que a él le pilló totalmente de imprevisto.
Para entonces parte de su familia había desaparecido, pero al llamar a su tía Lorraine, cuyo marido había ejercido de figura paterna para Nicholson, esta le confirmó que todo era cierto. Pero según la estrella, nada de ello le resultó traumático. Es más, a lo largo de los años ha bromeado varias veces al respecto, aunque en su momento pidió al periodista que dejase esa información al margen para evitar contaminar su carrera profesional con temas personales.