Luis Posada lleva décadas prestando su voz al cómico estadounidense y pudo verle en persona
Cierra los ojos un momento y trata de pensar en Jim Carrey en cualquiera de sus películas. Si fuiste niño en los 90 seguramente no tengas problemas en recordar una escena de Ace Ventura, La máscara o Dos tontos muy tontos. Este perfecto «creador de personajes», como le han llamado en varias ocasiones -sus papeles son míticos y recordados por siempre-, ha logrado estar permanentemente en nuestra mente y parte de ese mérito es del actor de doblaje que le pone voz en España: Luis Posada.
Este intérprete lleva muchos años estudiando el trabajo de Carrey para poder ajustar su versión española, algo que no es nada sencillo, puesto que el estadounidense tiende a la exageración tanto en sus gestos como en su voz. «Cada vez me ha ido costando menos, he ido entrando en su registro. Él también se ha ido atemperando con el tiempo», cuenta Posada en una entrevista para el canal de YouTube VozCast.
Es ahí donde recuerda la vez que pudo compartir unos minutos con el famoso actor, algo que guarda con mucho cariño. Sucedió durante la promoción de Di que sí, una comedia estrenada en 2008 que supuso un reto para el doblador, pero le dio también la oportunidad de verle cara a cara. Fue Carrey el que tenía ganas de conocer a la voz española y se interesó por bien quién estaba detrás.
«Muy simpático. Muy alto», dice entre risas. «Altísimo. Mira que ya había doblado películas de él y jamás pensé que era tan alto. Es un poco raro ver a alguien que has doblado tantas veces y que casi forma parte de tu familia».
Teníamos un poco el ‘handicap’ del idioma, pero más o menos nos pudimos entender. Le dije que llevaba 20 años -en su momento- y lo que me pareció entender es que me dijo ‘tú y yo hemos crecido juntos’.
Hubo incluso un pequeño malentendido con su equipo de seguridad. Mientras Posada hablaba con él, su mujer sacó la cámara para hacerles una foto y apenas puso la mano en el bolsillo los guardaespaldas se pusieron alerta. Carrey, que lo estaba viendo por el rabillo del ojo, les dijo que se tranquilizaran y que les hicieran una foto. «Como en las películas de cine mudo vi salir de detrás de un florero unos tres fotógrafos y nos hicieron unas fotos», relata.
Ante la pregunta de VozCast sobre la película de la que se siente más orgulloso, es precisamente esa comedia la que elige Posada. «Di que sí es una película que elegiría con la que quede muy satisfecho porque fue con la que se cerró el círculo, con la que pude hablar con él y pude conocerle», asegura.