El director ha dado a Benicio del Toro la oportunidad de salirse de la norma. «Está claro que piensa de forma diferente y va en contra de los estereotipos», señala el actor. «Me ha dado este papel para explorar algo diferente que no había explorado»
Wes Anderson ha alcanzado la docena de películas demostrando, una y otra vez, que lo suyo en la gran pantalla parece salido de otro mundo. «Siento que Wes inventó un lenguaje y un estilo, pero también una especie de tono y humor que no existía antes de él», afirma Michael Cera en SensaCine durante el Festival de Cannes. Allí, en el certamen francés, Anderson presentó su último proyecto. La trama fenicia, que se estrena en cines el 30 de mayo, es otro testamento de su cine, uno que vive en un universo que solo existe cuando lo crea él.
Cera es uno de los tantos nombres que forman el abultado elenco de La trama fenicia. En esta ocasión, Anderson tiene como protagonista a Zsa-zsa Korda, uno de los hombres más ricos de Europa, y su hija Liesl, una monja. El primero quiere dejar su legado a alguien y elige, claro, a la segunda. Korda está interpretado por Benicio del Toro, quien da vida a un personaje poco habitual en su filmografía. «Wes pensó en mí de forma diferente», dice el intérprete. «Está claro que piensa de forma diferente y va en contra de los estereotipos. Me ha dado este papel para explorar algo diferente que no había explorado en… No solo porque el personaje es un hombre de negocios o lo que sea, sino también porque el arco del personaje es un poco diferente a otras películas que he hecho».
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El personaje de Leisl corre a cargo de Mia Threapleton, hija de la actriz Kate Winslet y el director Jim Threapleton. «Mi viaje de descubrimiento de que quería ser actriz fue cosa mía», señala. «Recuerdo ver Bugsy Malone (1976) con Jodie Foster y amar esa banda sonora. Es una de mis películas favoritas. Recuerdo pensar: ‘Vaya, Jodie Foster, ¿cuántos años tenía cuando hizo Bugsy Malone? ¿Puedo hacer eso? ¿Es eso un trabajo que puede tener la gente? Parece muy divertido», añade. «Descubrí que podía hacerlo como un trabajo. Así que, por eso es por lo que estoy ahora aquí».
Está claro que piensa de forma diferente y va en contra de los estereotipos
Para Threapleton, dar vida a Leslie fue «interesante» porque, a diferencia de su personaje, no fue criada en el catolicismo. Por eso, lo más importante para preparar a Leisl fue «aprender y tener la oportunidad de aprender sobre catolicismo». «Una de mis pruebas de vestuario tuvo lugar en Roma, así que pude ir a Roma y cómo no vas a ir a dar una vuelta y pasar tiempo en el corazón del catolicismo. Absorber todo ese lugar, ese arte, esa información, la energía de ese lugar. Fue fascinante. De verdad que quería entenderlo todo sobre ese mundo en el que ha crecido Lisel porque ese era su ambiente. Esa fue su educación y me pareció muy muy importante«.
Del Toro, por su parte, tuvo a varias personas reales en mente a la hora de preparar a su personaje. «Había algo de Orson Welles«, señala. «Hablamos sobre mucha gente», dice el actor, mencionando a Francis Ford Coppola, un magnate armernio llamado Calouste Gulbenkian y, por supuesto, al libanés Fouad Malouf, el suegro de Anderson, que era empresario e ingeniero. «Nunca lo conocí, pero la película está dedicada a él», señala Del Toro.
El mundo de Wes Anderson
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«Todos los demás no estaban disponibles», bromea Riz Ahmed, otro de los actores del reparto, a la pregunta de qué cree que Anderson vio en él para incluirle en su proyecto. El intérprete da vida a Farouk, príncipe de uno de los reinos de Fenicia. «Creo que todo el mundo se hace estar disponible», añade su compañero de elenco Richard Ayoade.
El caso de Ayoade es curioso. Dirigió Submarine (2010), un filme independiente que recuerda mucho en estilo a la obra de Anderson. «Fue extraño. Esa película fue la forma en la que terminé conociendo a Wes. Ben Stiller era el productor ejecutivo y había salido en Los Tenenbaums. Una familia de genios (2001), así que le conocía», dice. «Hay veces que te gusta alguien tanto que, como artista, lo metabolizas».
Cuando entiendes y respetas su mundo te das cuenta de lo buen escritor que es y quieres preservarlo. No quieres estropearlo
Tom Hanks, Bryan Cranston, Jeffrey Wright, Scarlett Johansson, Benedict Cumberbatch y Rupert Friend son otros de los actores y actrices que aparecen en la película.
«Los estándares están muy altos», destaca Cera sobre cómo es eso de hacer una película de Anderson. «Llegas unas semanas antes de rodar y construyes, poco a poco, tu vestuario, lo que lleva tiempo, porque no van a parar hasta que todo esté perfecto. Luego ves cómo todo, poco a poco, va tomando forma delante de tus ojos e informa lo que estás haciendo como actor. Sientes que nadie va a parar hasta que consigan algo que sea perfecto«.
«Wes lo que quiere es contar la verdad y quiere que te lleves a ti mismo, que pongas lo que tienes», afirma Del Toro comparando cómo es trabajar con Anderson con otros directores. «Cuando entiendes y respetas su mundo te das cuenta de lo buen escritor que es y quieres preservarlo. No quieres estropearlo». «Su escritura era muy precisa», añade Cera.
Ahmed apunta a otra característica del cine de Anderson. «Es interesante. Con todos estos personajes habla mucho de la época en la que la historia se ambienta, pero también de nuestra era», destaca. «Hay una cualidad atemporal en lo que él está representando».
