El suceso ocurrió durante la era del #MeToo y la intérprete sintió que la oferta «no estaba bien». «Recuerdo sentirme muy orgullosa al salir», reconoció
El mundo del cine tiene un lado oscuro detrás de las cámaras. Olivia Munn lo experimentó hace años. La actriz tuvo, en el set de rodaje de una película, una experiencia que describió como «traumática». Por entonces, cuando el movimiento #MeToo surgía como reacción a los numerosos casos de agresión y acoso sexual de Harvey Weinstein, el estudio hizo todo lo posible por callarla.
«Hubo cosas que ocurrieron en el set de esa película, personalmente a mí, que no estaban bien y fue tan traumático que tuve que presentar una queja al estudio», reveló Munn el pasado mes de febrero en el podcast Reclaiming with Monica Lewinsky. La intérprete no especificó ni el filme ni el estudio, pero sí dio algunos detalles sobre la reacción de este último.
«Llegó a un punto en el que me ofrecieron mucho dinero, muchísimo dinero -siete cifras- para aceptar sus disculpas. Pero venía con un acuerdo de confidencialidad», afirmó. «Sentí que no estaba bien y, en ese momento específico, esto fue en el arranque del #MeToo y Time’s Up… Esto fue como el ajuste de cuentas, el ajuste de cuentas de Harvey Weinstein que lo inició todo. Era esa época y era cuando la gente atacaba a cualquiera que firmara un acuerdo de confidencialidad diciendo: ‘Oh, solo lo hiciste por dinero’. Así que temía que eso anulara cualquier tipo de validez».

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Munn contó que tenía miedo de que el estudio filtrara el Acuerdo de confidencialidad «en un esfuerzo para menospreciar» su voz. La actriz se reunió con el estudio y sus abogados, quienes le aconsejaron que reconsiderara la oferta. Finalmente, decidió no firmar nada. «Recuerdo sentirme muy orgullosa al salir, muy orgullosa de mí misma», recordó. “No pensé en negociar. No pensé en nada más que en lo irrespetuoso que era», añadió. «Poco después, California ilegalizó los acuerdos de confidencialidad».
En el año 2017, Munn acusó al director Brett Ratner de acoso sexual. La actriz afirmó que el cineasta se había masturbado delante de ella mientras visitaba el rodaje de El gran golpe (2004) en 2004. En el año 2018, mientras rodaba Predator (2018), notificó al estudio, 20th Century Fox, de que un actor fichado como delincuente sexual, amigo del director Shane Black, formaba parte del elenco. La escena fue eliminada después de que la intérprete diera el aviso.