En la era pre-redes sociales, toda la locura de los fans de Perdidos en español se volcaba sobre una página: Lostzilla. Allí, los moderadores hacían un resumen de cada episodio con todas las preguntas que quedaban resueltas, los detalles, las pistas, todo lo necesario para no perderte ni uno solo de los muchísimos secretos que -sin duda- iban a quedar bien resueltos al final de la serie. Vale, ahora sabemos lo que pasó y que muchos de ellos quedaron en el aire, pero siempre nos quedará el recuerdo de entrar después de cada episodio a ver referencias peregrinas a los números en las que probablemente ni Damon Lindelof había caído. De ahí, fuimos para abajo.
Saltando el tiburón
Me enganché perdidamente a Perdidos en el episodio 11. ¿Y cómo no hacerlo? El grupo, de repente, se encontraba con una escotilla que llevaba a algún lugar, aunque no sabríamos qué escondía hasta el inicio de la temporada siguiente, donde conocimos la palabra «Dharma», la secuencia de números (4 8 15 16 23 42) y acabamos por volvernos auténticos enfermos por seguir cada uno de sus misterios.
Sin embargo, en nuestra manía por encontrar las miguitas de pan que aparentemente nos iban dejando, más de una vez llegamos a la nada más absoluta. Es el caso del famoso «tiburón de DHARMA» que apareció en el segundo episodio de la temporada 2 de Perdidos y que solo los espectadores más avezados reconocieron como un animal con el logo de la iniciativa en su cola. Por supuesto, todo el mundo se volvió loco tratando de saber qué significaba, a cuento de qué venía y, por supuesto, cuál era su unión con el famoso Humo Negro.
La solución era mucho más sencilla: realmente, los creadores lo pusieron en la serie como guiño a los fans, sin que nunca se diera una explicación concreta. Posiblemente, en DHARMA estarían experimentando también con tiburones y otros animales locales y, para reconocerles, les pusieron el logo en la cola. Y por ahí se fueron todas las teorías sobre tiburones radio-controlados. ¡Así era Perdidos!
