Era la primera película de acción real de una popular franquicia, pero fue un absoluto fracaso que encarnó «lo peor que el género tiene para ofrecer»
«Esta película es lo que pasa cuando la única razón que hay detrás de ella es que ‘a la gente le gustaba este juguete'». Es la reflexión que el crítico Allen Adams hacía sobre la película de superhéroes peor valorada de la historia y, sin duda, el mejor resumen del fracaso que fue Max Steel, un filme basado en la línea de juguetes del mismo nombre de Mattel que se estrenó en 2016 y que no solo se la pegó en términos económicos sino que fue absolutamente destrozado por la crítica.
Dirigida por Stewart Hendler con guion de Christopher Yost Max Steel es la única película de superhéroes que tiene, de hecho, una puntuación de 0% en Rotten Tomatoes, con críticas que no salvan ni el más mínimo detalle: «Serpenteante y sin vida», «Una película que encarna lo peor que el género tiene para ogrecer», «Espectáculo sin espectáculo» y «Una pérdida de tiempo», son solo algunos de ellos.
La historia de ‘Max Steel’
Max (Ben Winchell) tiene que lidiar con los problemas habituales de ser un recién llegado en una nueva ciudad: no solo tiene que lidiar con una madre sobreprotectora (Maria Bello), sino que después de su primer día de escuela Max también se encuentra con que no se puede sacar de la cabeza a su compañera Sofía (Ana Villafañe). Entonces Max hace un descubrimiento que cambiará su vida para siempre: su cuerpo parece ser capaz de desarrollar superpoderes únicos, pero tendrá dificultades para controlarlos hasta que conozca a la misteriosa criatura alienígena Steel.
Cuando Max y Steel unen fuerzas, pueden controlar los superpoderes de Max y convertirse en un equipo imbatible: Max Steel. Sin embargo, sus habilidades no pasan desapercibidas y pronto se convierten en el foco de atención de un misterioso grupo que quiere usar sus poderes para sus amenazantes planes.
«Una franquicia de superhéroes que nunca, jamás, va a suceder»
La línea de figuras de acción Max Steel se desarrolló entre 1999 y 2013 y, durante ese tiempo, dio lugar a una serie de cómics y varios proyectos de ficción. En el año 2000 se produjo una primera serie animada y en 2013 un reboot de la original, así como diversas películas.
La película de 2016, no obstante, es la primera y única película de acción real de la franquicia Max Steel, y lamentablemente también la que puso punto final al interés de explotar la franquicia en el audiovisual.
«No es sólo fea, sino aburrida, y es una pena considerando que el concepto al menos tiene potencial», lamentaba el crítico de Cinema Crazed.
«Lo que es verdaderamente deprimente de toda la empresa es que [Andy] García y [Maria] Bello se vieran arrastrados a ella», escribieron en The Hollywood Reporter. «Sí, a los actores les encanta trabajar y hay que pagar las facturas, pero tal vez se podría crear un fondo para ahorrarles a los actores talentosos este tipo de vergüenza profesional».