Reservas en un hotel o una casa rural y antes de hacer el check-in, el dueño del alojamiento te pide los DNIs de todas las personas que irán contigo. Es una práctica muy extendida y que va a ir a más. Uno puede pensar que compartir el DNI sin más es peligroso y efectivamente es así. Aunque sea una empresa o un profesional, nunca debemos enviar nuestro documento de identidad tan alegremente.
¿Cuál es la solución? Enviarles el DNI, pero editado para cuidar nuestra seguridad. ¿Cómo? Hay muchas alternativas, pero principalmente editando el DNI con una aplicación de edición de imágenes y añadiendo marcas de agua.
Porque hay que tener presente una cosa, aunque sí hay trámites como el registro en hoteles o alojamientos que necesitan el DNI para evitar el blanqueo de capitales, este no necesita ser estrictamente una copia exacta del original. Según explica Samuel Parra, abogado experto en privacidad y protección de datos: «se podría recordar que, respecto a los trámites ante la Administración General del Estado, está prohibido que nos pidan fotocopia del DNI desde el Real Decreto 522/2006, de 28 de abril».
Difuminar y añadir un mensaje de texto
¿Cómo podemos modificar el DNI para que nos lo acepten igualmente? Una respuesta nos la da la policía local de Elche. En este caso, lo que recomiendan es difuminar algunos datos sensibles que sean innecesarios para el receptor y principalmente añadir una nota, donde se ponga cuál es el uso del envío de este DNI.
Imagen: Policía de Elche
Estas notas se pueden añadir de forma fácil con la aplicación nativa de Fotos en iOS o desde Google Fotos para Android. También desde muchas de las aplicaciones de galería nativa, que permiten editar imágenes.
Podemos añadir una nota explicativa, por ejemplo: «Copia del DNI para el Hotel X». Este texto permitirá que no usen el DNI para otra cosa y sigue permitiendo al establecimiento comprobar nuestra identidad.
Otras recomendaciones pueden ser difuminar ligeramente la foto principal o pixelar la firma. De nuevo suficiente para que se vea quiénes somos, pero suficiente notable como para que se note que ha sido editado.
Desde el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) explican que esta práctica es habitual pero hay riesgos como una suplantación de la identidad. Frente a ello, recomiendan que sigamos una serie de pasos antes de enviar el DNI: verificar la identidad del receptor, utilizar métodos de envío seguro (por ejemplo proteger con una contraseña el archivo) y pedirle al receptor que una vez ya no sea necesario, elimine nuestro DNI de sus sistemas.
Aunque desde organizaciones como la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) solicitan (e incluso han puesto multas) que no se pida tan alegremente el DNI, la realidad es que es una práctica totalmente extendida a la hora de viajar y reservar alojamientos por internet. Por ello desde aquí recomendamos llevar mucho cuidado y editar ligeramente el DNI antes de enviarlo sin más.
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